Ser víctima de un accidente de tránsito puede convertirse en una experiencia traumática y dolorosa. Además de generar heridas físicas y costos monetarios, sufrir un choque automovilístico puede devenir en un trauma psicológico grave. Para estos casos es conveniente conocer cómo reaccionar ante cualquier consecuencia mental o psicológica.
Identificar las emociones
Uno de los factores clave después de sufrir un accidente de auto es identificar las emociones. En algunos casos puede que el incidente no haya sido tan grave, sin embargo, cuando la víctima se coloca nuevamente en el volante puede llegar a sentir emociones como miedo, ansiedad o incluso tristeza.
Es importante identificar estas emociones y no reprimirlas. Sentir miedo o ansiedad después de un accidente de tránsito es habitual. Las emociones son una respuesta a un evento traumático, reconocerlas es el primer paso para salir adelante.
Buscar ayuda
Luego de identificar las emociones es recomendable buscar ayuda. Un primer acercamiento puede darse con familiares y amigos. Compartir las emociones y hablar de lo que la víctima siente puede disminuir la soledad. Además, existen terapias grupales a las que también valdría la pena acercarse.
Adicionalmente, es importante considerar la ayuda de un profesional de la salud. Acercarse a un psicólogo es otro paso para controlar las emociones y superar el trauma.
Mantener una rutina de autocuidado
Existen distintas formas en que una rutina de autocuidado puede ser beneficioso para aquellas personas que intenten superar un trauma. Las actividades diarias y habituales ayudan a los individuos a retomar el control de sus vidas y a regresar a la normalidad. Algunas actividades que se recomienda incluir en una rutina son:
- Ejercicio físico.
- Técnicas de relajación.
- Meditación.
- Alimentación saludable.
- Cuidar las horas de sueño
Es importante mencionar que si el estrés, miedo, ansiedad y dolor permanecen en el tiempo se debe acudir inmediatamente con un profesional. Nadie tiene por qué vivir con dolor. Tampoco es normal vivir bajo la incertidumbre. La asistencia de un profesional puede ayudar a generar espacios seguros.
Finalmente, las víctimas de accidentes de tránsito también pueden buscar ayuda legal. Un abogado con experiencia en lesiones personales les será de gran ayuda para luchar por una indemnización que incluya los gastos económicos y no económicos. Esto contempla los tratamientos médicos e incluso los costos de acudir con un psicólogo.