La muerte de un ser querido es uno de los eventos más dolorosos que una persona puede pasar en esta vida. El evento es aun más trágico cuando esa muerte es el resultado directo de la negligencia de otra persona o entidad. Si usted conoce a alguien que fue la víctima de un accidente fatal causado por la negligencia, podría estar preguntándose si califica para presentar una demanda de muerte por negligencia.
Quién puede recibir la compensación
Bajo la ley de Washington (enlace en inglés), el representante legal del difunto es el que puede presentar una demanda por la muerte del difunto que resulta de la negligencia de otro. Esta demanda se presenta de parte de los beneficiarios, que se definan específicamente en los estatutos de Washington.
Si el difunto dejó un cónyuge y/o hijos, cualquier compensación que el representante pueda sacar de la demanda irá primero a ellos. Si el difunto no tenía ni cónyuge ni hijos, la compensación puede ir a los padres y hermanos del difunto.
Qué pueden recibir
Los seres queridos del difunto tienen el derecho de recibir compensación por su pérdida económica. O sea, si dependían del difunto para su manutención financiera, podrían recuperar el valor del sueldo del difunto, además que los costos asociados con el funeral y más.
La compensación para una muerte por negligencia no se limita solo a daños económicos. También usted podría recibir la compensación por los daños emocionales que sufrió. El dolor y sufrimiento emocionales son daños verdaderos que, aun si no tienen un valor financiero específico, igual se deberían compensar. En la acción legal, el representante legal puede pedir la compensación por esos daños también.
No existe cantidad de dinero en este mundo que pueda compensar adecuadamente a una familia por la pérdida de un ser querido. No obstante, si necesitan una compensación para poder seguir adelante financieramente después de su pérdida, la ley les ofrece esa oportunidad.